Si emprender y tener tu propia empresa es tu gran sueño, considera los obstáculos que inevitablemente vas a enfrentar.
El boom de las empresas en línea es una realidad. Mucha gente está considerando comenzar su propio negocio en Internet como una forma de hacer dinero y conseguir la independencia financiera que tanto anhela. Mientras hay varias ventajas a esta estrategia, incluida la posibilidad de un sólido ingreso mensual, existen varios obstáculos que pocos parecen considerar:
- El comienzo nunca es fácil. Mucha gente piensa que una gran idea es el componente principal para arrancar una empresa. Esto no es así. Una buena idea es importante, pero mucha gente tiene muchas buenas ideas y no todos son empresarios exitosos. La ecuación correcta es solo el 1% de la fórmula, el otro 99% es implementar la idea. Habrá muchos retos, obstáculos y fracasos y momentos en los que quieras tirar la toalla. Solamente ten presente que una idea genial no te llevará al éxito por sí sola.
- Tus horarios serán más difíciles de cumplir. Hay quienes piensan que tener su propio negocio los hará tener más tiempo libre; la gente asume que ser su propio jefe le permitirá liberar su calendario. Esto no es cierto, pues tendrás que trabajar más fuerte que nunca y cuidar responsabilidades que jamás consideraste tuyas. Tu negocio es como un bebé y requiere de toda tu atención; como dice el dicho “el que tiene tienda, que la atienda”.
- No serás el mejor jefe del mundo. Probablemente piensas que ser tu propio jefe será genial y frecuentemente no es así; no importa si se trata de una empresa de apenas dos personas. Ser un jefe, incluso ser nuestro propio jefe, es asumir la responsabilidad cuando algo sale mal. Habrá veces que desees trabajar para alguien más y que ese alguien asuma la responsabilidad de las acciones tomadas.
- Un negocio en línea debe estar siempre en línea. Puede resultar obvio pero siempre habrá gente queriéndote contactar, siempre habrá personas interesadas en tu oferta y eso hará que difícilmente puedas cerrar tu computadora, apagar tu teléfono o tu tableta y, simplemente, disfrutar la vida. Internet te mantendrá atado a tu compañía, inevitablemente, donde quiera que estés.
Si tienes presentes estas consideraciones podrás enfrentar los obstáculos como todo un experto.