Apenas un día después del debut del iPhone 7, la gran pregunta de los inversionistas de Apple continúa siendo si este nuevo modelo será recibido como una versión completamente nueva o si será un nuevo modelo “S”.
En un aviso de prensa para CNBC, la compañía indicó:
Las ventas iniciales serán gobernadas por la oferta, no la demanda. Y hemos decidido que ya no es una métrica representativa para nuestros inversionistas y clientes. Por eso, a partir de ahora ya no revelaremos los números de ventas del primer fin de semana.
Apple también avisó que las guías y métricas para sus reportes de periodos seguirá siendo el mismo, quedando en un revenue estimado de $45.5 y $476 mil millones de dólares.
También quedarán en misterio los números de las preventas del equipo. No es la primera vez que Apple decide no dar números sobre un producto. Las cifras exactas de ventas del Apple Watch continúan siendo estimaciones de analistas; la empresa no ha dado indicaciones más allá de “todo va bien”.
En contraste, durante el keynote de ayer, Tim Cook indicó que Apple se ha convertido en el segundo vendedor de relojes en el mundo, detrás de Rolex. Es lógico pensar que las ventas del nuevo modelo, también presentado durante el evento del 7 de septiembre, serán igualmente un misterio.
Tendremos que esperar al reporte del Q4 para ver si la apuesta de Cupertino para el iPhone 7 fue bien recibida. Muchos analistas han ponderado la crítica pública a la decisión de eliminar la entrada del puerto de audífonos, considerándolo un punto en contra y un posible factor determinante para que los clientes no compren el nuevo teléfono.
Referencia: CNBC
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