El Galaxy Note7, último smartphone de gama alta de Samsung, dejará de venderse en los países en los que ya se comercializa tras encontrarse al menos 35 casos con posibles fallas en la batería.
La compañía surcoreana envió un comunicado en el que admitía haber recibido noticias de 35 casos en el mundo con problemas en sus celulares, tras lo que habían procedido a una investigación en busca de otros posibles incidentes en el mercado con las baterías de su nuevo smartphone.
“Sin embargo, y puesto que la seguridad de nuestros clientes es una prioridad absoluta en Samsung, hemos detenido las ventas del Galaxy Note7”, explican en el boletín publicado en su blog.
“Para aquellos clientes que ya tienen un Galaxy Note7, reemplazaremos voluntariamente su dispositivo actual con uno nuevo en las siguientes semanas”, añaden.
Como informa El País, la marca ha decidido posponer sin fecha el lanzamiento. Este se iba a producir próximamente en México y en varios mercados europeos, como España.
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